Una pequeña reflexión sobre por qué muchos de los fenómenos extraños y terrores se dan de noche. La oscuridad parece que altera de alguna forma nuestra psique, quizás haciéndola más receptiva a determinadas señales. ¿Cuantas apariciones supuestamente fantasmales han sido divisadas de día? Mucho menos numerosas que las que se dan por la noche. ¿Existe una «hora del misterio»? ¡Dale al play!